Al momento
de leer como al escribir, aprendemos nuevos conocimientos, somos capaces de
comunicarnos a través del espacio y del tiempo, y propiciamos la reflexión y la
creación sometidas en un mundo donde interpretamos lo que se lee y lo que se
escribe. La comunicación escrita también tiene un carácter funcional, ya que
nos ayuda a relacionarnos con el resto de la sociedad, por ejemplo, con
instituciones u organismos públicos a
través de contratos, leyes, solicitudes, cartas laborales. Se usan letras, tildes
y signos de puntuación para construir el mensaje. Es reflexiva, organizada,
elaborada y lógica, tiene un fin según lo que el autor escriba un ejemplo claro
un contrato laboral, posee todas las clausulas y tiene un proceso de orden y
debe ser bien elaborada y lógica.Se establece una relación unilateral entre el
emisor y el receptor.
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